Espejitos de colores

Mientras que desde algunos lugares se intenta vender a la minería como la panacea para la riqueza y desarrollo económico del sur mendocino, la realidad de esa actividad muestra que las cosas no son como las pintan.

Las exportaciones mineras en 2014 siguieron bajando, una tendencia que ya lleva varios años, y a ello se suma la caída de los precios de los metales en los mercados internacionales. Las ventas externas del sector acumularon una caída de 4,5% anual medida en dólares. 

Los valores de los principales minerales exportados por Argentina aceleraron su caída en los últimos meses de 2014. Entre julio y diciembre, se observaron fuertes descensos en el precio del oro (-8,4%), el cobre (-9,4%) y especialmente la plata (-22,4%). Y la tendencia general indica que se mantendrían en niveles bajos.  

Para ser claros, de los casi seis mil millones de dólares exportados en 2012 se ha bajado a 3905 en el año que terminó. Luego de un largo ciclo de precios altos de minerales e hidrocarburos, el escenario mundial cambió. 

A las superpotencias les conviene enormemente esta baja porque así multiplican sus ganancias. Vale preguntarse entonces, frente a ese futuro, si vale la pena cambiar una matriz productiva histórica como la agricultura y sacrificar recursos naturales como el agua, frente a una promesa al menos incierta.