Los trabajadores de Oil acusan a Abad: «¿Quiere cobrar o condenar a los trabajadores?»
Los empleados de la refinería de Oil Combustibles en Santa Fe se definieron en contra de la postura del titular de la AFIP: «¿Cómo es posible que se prefiera mandar a la quiebra a una empresa antes que permitir que pague sus deudas, crezca y mantenga las fuentes de trabajo?»
Queremos expresar ante la opinión pública, al señor Abad y al Gobierno Nacional, que nosotros somos trabajadores petroleros, que conocemos el valor estratégico de nuestro trabajo, y que somos expertos en la extracción, el transporte, la refinación del petróleo y la distribución de sus subproductos. Nos enorgullecemos saber que nuestro esfuerzo diario permite que los buques transporten nuestras riquezas, que las máquinas cosechan nuestros granos, que los camiones transiten nuestras rutas y que la energía llegue a los hogares argentinos.
Estuvimos presentes en la reciente audiencia judicial donde los directivos de la nueva administración, OP Investments, presentaron al Sr. Juez su proyecto de salvataje y de inversiones, donde se comprometieron a pagarle a la AFIP con un desembolso inicial de $952 millones y cuotas de S112 millones mensuales, hasta saldar la totalidad de la deuda.
La nueva administración también presentó en el juzgado un plan de inversiones para relanzar a Oil Combustibles y al resto de las compañías, lo que significará más trabajo digno y de calidad. Este plan, conocido por los trabajadores, generó en nosotros, nuestras familias y en todo el cordón industrial del Gran Rosario, un clima esperanzador, la posibilidad de futuro laboral cierto para todos y toda la región.
En este contexto, hacemos un llamado al Gobierno Nacional para que arbitre los medios a fin de editar que un funcionario técnico- administrativo, despojado de sensibilidad política y social, incapaz de dimensionar las consecuencias que su conducta de burócrata acarreará para la economía nacional y el daño aparejado, totalmente alejado de los objetivos del Gobierno Nacional tendientes a mantener y generar puestos de trabajo, arrastre a la quiebra a esta Refinería San Lorenzo y a las empresas del Grupo y, con ello, el despido y hambre de las familias de sus 4.000 trabajadores directos y 11.000 indirectos.
¿La AFIP quiere cobrar lo que se le debe al Fisco o condenar a los trabajadores por la conducta contraria a derecho que le endilga a nuestro antiguo patrón? ¿Cómo es posible que se prefiera mandar a la quiebra a una empresa antes que permitir que pague sus deudas, que crezca y mantenga las fuentes de trabajo?
Los trabajadores nos mantenemos en Asamblea permanente, esperando la respuesta del Gobierno Nacional.