RENOVANDO LA ALIMENTACIÓN
Con la llegada de la primavera como cada estación del año nos ofrecen diferentes tipos de alimentos.
En esta época con la llegada del buen tiempo, nuestra alimentación y nuestro estilo de vida de modifica, más aún cuando el encierro por la pandemia nos hizo engordar y descuidarnos.
En esta época nos vemos atraídos por alimentos frescos, como verduras y frutas, consumimos mayor cantidad de líquidos y los movemos más porque el cuerpo nos pone más activos.
En general, en esta época muchas personas tratan de bajar los kilos de más acumulados en invierno y lo queremos hacer rápidamente sin importar las consecuencias nutricionales que nos pueda afectar.
Nos exponemos a dietas restrictivas, en la que, de golpe, eliminamos varios grupos de alimentos y con una aporte inadecuado de nutrientes y calorías.
En caso de querer bajar de peso, el objetivo es poder llevar a cabo una alternativa alimentaria sin «dietas restrictivas», donde el alimento sea más que un transporte de nutrientes y calorías. La comida forma parte de nuestra vida cotidiana, conformando un lenguaje que compartimos con otros y generándonos placer, palabra prohibida si nos pasamos de dieta en dieta-
Debes tener en cuenta siete consejos generales para empresar la modificar los hábitos alimenticios y de esta manera no tener que hacer ninguna dieta.
-Respetar las cuatro comidas diarias (desayuno, almuerzo, media tarde y cena), incorporando dos o tres frutas de estación en las ingestas.
-Consumir una porción de verdura cruda y otra porción cocinada durante el día, al menos 1/2 plato en almuerzo y cena.
-Incorporar carne vacuna, pollo, pescado o huevo una vez al día.
– Consumir en el almuerzo o cena una porción de alimentos ricos en hidratos de carbono (lentejas, papas, camote, choclo, arroz, fideos, garbanzos) siempre acompañados por verduras.
– Hidratarse bien, se debe consumir de 6 a 8 vasos grandes de agua al día.
No es caminos fácil cambiar los hábitos alimentarios, comer algo rico sin culpa, sentir que lo hay nada que no podamos comer y si nos alegramos y compartimos cada alimento, vamos a llegar al hambre controlado sin desesperando por comer. Es fundamental alimentarnos de manera consciente y escuchar nuestra panza. En la vida, para nutrimos la organización es la clave del éxito.