Renunció ministro clave y se agrava crisis política

La tormenta que se desató en Chubut tras la muerte del exmandatario Mario Das Neves sumó ayer un doble capítulo, con la renuncia del ministro de Economía Pablo Oca y la caída de la sesión extraordinaria convocada para hoy donde el gobernador Mariano Arcioni apuntaba a lograr la adhesión local del Pacto Fiscal firmado por las provincia con Nación.

En cuanto a la salida de Oca, el ministro ya venía caminando por la cuerda floja. De hecho, es su segunda renuncia. La primera fue en enero. Luego continuó en su cargo y a inicios de mes Arcioni (Chubut Somos Todos) debió desmentir que el titular de Economía tuviera las horas contadas. Ayer, finalmente, se terminaron los rumores y Oca presentó la renuncia indeclinable en un contexto en que también se abrirá el debate por la llegada de la minería a la provincia, hoy prohibida por ley.

Su reemplazante será Alejandro Garzonio, quien asumirá este lunes y ya ocupó ese cargo durante el primer mandato de Das Neves. «Conoce el manejo del Ministerio además de conocer la situación actual en la que está la provincia», dijo al respecto el mandatario.

A mitad de enero, el gobernador ya había realizado una limpieza en su gabinete, con el objetivo de afianzar su poder político ante el desafío del ala dura del dasneveísmo, que nunca terminó de digerir que un outsider como Arcioni (escribano, de profesión) terminara de quedarse con el Ejecutivo.

«Con el ministro de Economía había una interna muy grande», dijeron a este medio desde la provincia. Una pulseada en la que Arcioni trató de desligarse de responsabilidades respecto a la situación de déficit heredado (ver página 17). El gobernador había deslizado a inicios de año el riesgo del default de Chubut y fue Oca quien al día siguiente dijo que esa situación era falsa. Antes, Sergio Mammarelli, ministro Coordinador puesto por Arcioni al asumir -y uno de sus leales- había declarado que la situación de Chubut era peor que la de Santa Cruz, con respuestas inmediatas de indignación de sus pares.

En ambos casos, las declaraciones fueron una forma de marcar la cancha a quienes no se encolumnaban detrás de Arcioni y venían desde tiempos de Das Neves gestionando la provincia. Provincia que hoy recibe auxilios financieros de la Casa Rosada para gastos tan elementales como pagar sueldos en fecha.

En este sentido, el distrito patagónico tampoco está recibiendo aportes resultantes del Pacto Fiscal, y ayer tuvo otro revés el intento de Arcioni de torcer la voluntad de la oposición en la legislatura.

Chubut es una de las tres provincias que no logró el aval al Pacto (las otras son La Pampa y Jujuy -sin contar a San Luis que nunca suscribió -). Y el gobernador había llamado a sesiones extraordinarias para hoy con el fin de conseguir acuerdo legislativo para comenzar a recibir los fondos retenidos de forma retroactiva. Esas remesas se perderán si la adhesión no llega antes del 31 de marzo.

Sin embargo, la comisión que debía ratificar el llamado decidió voltear la sesión por 4 votos a 1. «Son unos irresponsables, caraduras, que tienen estas actitudes desde la opulencia y la ociosidad de sus bancas», estalló el gobernador.

«El Pacto Fiscal hace dos meses que está para su tratamiento, y mientras tanto la Provincia hace dos meses que se está desfinanciando. ¿Y no es urgente el tratamiento de estos temas?», se preguntó el mandatario provincial consultado por la prensa.

Chubut, además, se prepara para audiencias públicas respecto al proyecto de extracción de plata con inversiones por u$s1.000 millones que presentó hace dos días el ministro de Energía de la Nación, Juan José Aranguren. Otro tema caliente que necesitará acuerdos para modificar leyes y convencer a la sociedad civil sobre la ausencia de riesgos ambientales de una iniciativa que podría darle oxígeno a Chubut.