Amatistas, ágatas y piedras, otro fruto de nuestro suelo
Entre las riquezas minerales que posee el departamento, se encuentran distintas piedras semipreciosas que se usan para cosas tan diversas como joyería, decoración, o simplemente traer buena suerte. Es parte de la minería no contaminante, junto con el yeso, mármoles, áridos y sal.
El sur provincial se caracteriza por tener un gran potencial de minerales que se extraen del suelo, atracción para muchas empresas que buscan instalarse en esta región. En nuestro departamento es importante la producción de rocas para la industria de la construcción, pero un detalle llamativo es que dentro de los minerales, se comercializan desde áridos hasta piedras destinadas a su uso en joyería.
Hay unas 30 empresas mineras que están funcionando en la actualidad en la extracción, de acuerdo a la información brindada por la Dirección de Minería de San Rafael. La regulación del funcionamiento de estas empresas está dada por la Ley Nacional 24.585 y la Provincial 5961, y es actualmente motivo de fuerte polémica respecto a la posible contaminación. Desde este organismo, Santiago Germanó, al margen del marco polémico, explicó cuál es la riqueza mineral de nuestra zona: «Hay un potencial enorme para la industria minera en el departamento, mayormente lo que tiene que ver con áridos». Pero también señala que «se encuentra lo que son agatas, amatistas, que son algunas de las que se utilizan en joyería. Pero es muy poco lo que se extrae porque la minería está muy limitada, a pesar de haber un alto potencial».
Se trata de piedras semipreciosas que tienen valor para la joyería y el arte. La amatista es la variedad del cuarzo más apreciada. Las más perfectas se tallan para joyería y el resto se utiliza para hacer objetos de arte. Debido a su importancia como gema, existen varios términos utilizados en joyería para describir las distintas tonalidades de la amatista. Las ágatas tienen la propiedad de absorber y transformar la energía negativa, es por ello que se usan para armonizar ambientes y personas. Se pueden colocar en la casa o llevarlas en forma de joyas o directamente en los bolsillos.
De esta manera, dentro de los materiales extraídos para uso gemológico, se encuentran lo que se denomina nódulos de calcedonia y ágatas, cabujones, cuentas y tamboreadas como componentes para uso en joyería. Al respecto, Germanó señala: «Se extrae una o dos mochilas de ágatas o estas piedras para cortes y eso se suministra todo el año porque la demanda es poca. Se comercializa a nivel provincial, interprovincial y algunos destinos internacionales, pero es poquito lo que se exporta en realidad». Las ágatas, cortadas y pulidas en láminas de variados espesores o en geodas se utilizan para confeccionar todo tipo de objetos y diversos usos ornamentales.
Fuente: Diario de San Rafael