HALITOSIS; EL MAL ALIENTO
En estos tiempos de pandemia, cuando el encierro nos satura, el mal aliento o halitosis es un problema personal y social que nos afecta.
El mal aliento se exala por la cavidad bucal y no se cura con la higiene bucal de rutina y tampoco desaparece con la limpieza a fondo del odontólogo.
La halitosis crónica no es diagnosticada adecuadamente por el odontólogo, ya que se encuentra en un campo desconocido, muchas veces hasta por médicos que no lo tienen en cuenta.
Por esa causa el paciente llega al consultorio cansado, desesperanzado, y en silencio espera la receta y muchos manifiestan haber consultado en varias oportunidades sobre el mal aliento a especialistas que no tratan la halitosis por lo conocer su tratamiento.
La medicina moderna ha investigado la mayoría de los padecimientos de las personas, y por encuestas se sabe, por ejemplo que entre el 20 al 23% de la población mundial padece mal aliento.
Los distintos aspectos de la vida se ven alterado, la vida en pareja, el trabajo, la vida social y la autoestima, ya que la halitosis es todo un problema. El paciente llega muchas veces a aislarse, dejando de asistir a eventos, reuniones, dejando de estudiar, trabajar y hacer deportes.
Las causas del mal aliento las encontramos en comidas fuertes, ajos, cebollas, condimentos fuertes, cigarrillos, o alto consumo de azúcar.
Existen unas 75 causas de halitosis, el estrés es una de ellas, para lo cual el especialista debe comenzar con la valoración de los antecedentes médicos y odontólogo del paciente, las consideraciones personales, el examen clínico integral y el test del aliento con un aparato reconocido internacionalmente y diseñado para medir compuestos volátiles que causan el mal aliento.
El tratamiento depende de unas 75 causas y consiste en colocar una canícula en la boca y en breves segundos el aparato describe las posibles causas del mal aliento. El tratamiento no es invasivo é inodoro, con el cuál logramos establecer al paciente con concentraciones adecuadas de oxígeno mediante ozonoterapia y promoviendo un equilibrio bacteriano.
Es posible que en Mendoza, algún instituto odontológico haga este examen para mejorar la vida social de pacientes que han sufrido halitosis por años.